Ingredientes:
Prefermento:
100 g. de harina de fuerza
100 ml. de agua
9 g. de levadura fresca de panadería
Masa:
500 g. de harina de fuerza
12 g. de sal
300 ml. de agua
Elaboración:
Disolvemos la levadura desmenuzada con el agua tibia y lo mezclamos con la harina.
Dejamos tapado durante 30 minutos hasta que doble su volumen en un lugar templado.
Colocamos 500 g. de harina en el bol de la amasadora. Añadimos el prefermento y el resto del agua con la sal disuelta. Amasamos a media velocidad durante 10 minutos. Sacamos la masa al mármol y terminamos de amasar un poco a mano. Formamos una bola y la dejamos fermentar en un bol de plástico con tapa durante una hora en un sitio templado igual que antes.
Ahora sin desgasificar la metemos a la nevera hasta el día siguiente.
Sacamos de la nevera y dejamos que se atempere una media hora.
La volcamos sobre la mesa y sin desgasificar mucho cortamos ocho trozos de unos 120 g. cada uno.
Formamos una bola con cada uno dando un par de pliegues a la masa.
Dejamos las bolas tapadas con papel film durante 15 minutos.
Cogemos una bola y la aplastamos un poco con las manos formando como un óvalo. Vamos enrollando metiendo las puntas hacia adentro y formamos el bollito.
Los vamos colocando en una bandeja con papel de horno.
Tapamos con un paño y las llevamos durante una hora y cuarto hasta que fermenten y doblen su volumen.
Precalentamos el horno sólo con la parte de abajo a 270º durante 15 minutos.
Ponemos en el fondo una bandeja con un vaso de agua y encima colocamos otra bandeja.
Espolvoreamos los bollos con un poco de harina con ayuda de un colador y hacemos un corte con una cuchilla o un cuchillo bien afilado.
Pasamos los bollos con el papel de horno a la bandeja del horno caliente y espolvoreamos con agua.
Horneamos durante 15 minutos a 270º con la parte de abajo sólo encendida y luego cambiamos a calor arriba y abajo bajando la temperatura a 225º y cocinamos durante 20 minutos más.
Dejar enfriar sobre una rejilla.
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