Ingredientes:
400 g. de harina de fuerza
2 g. de levadura seca de panadero
320 ml. de agua
7 g. de sal
Elaboración.
Ponemos en un bol la harina tamizada, añadimos la sal y removemos. Añadimos la levadura y por último el agua fría. Mezclamos todo bien con una cuchara de madera.
Pasamos la masa a otro bol un poco aceitado y lo dejamos tapado en la nevera durante 12 horas.
Sacamos la masa volcándola sobre la mesa de trabajo bien enharinada.
Con cuidado de no desgasificar la masa formamos un rectángulo y enrollamos. Lo partimos por la mitad para hacer dos panes. Cerramos bien las puntas y le damos la vuelta espolvoreando con harina por encima de cada trozo. Tapamos con un paño y dejamos reposar durante una hora y media a temperatura ambiente.
Ahora los colocamos sobre papel de horno enharinado dándoles otra vez la vuelta a la vez que estiramos la masa con mucho cuidado de no desgasificar para formar las barras más largas y colocamos encima de una bandeja del tamaño de las del horno. Enharinamos por encima.
Cuando falten 35 minutos para acabar el levado encendemos el horno a 230º con calor solamente de abajo y colocando dos bandejas de horno en las rejillas más bajas del horno.
Pasamos con cuidado las barras con el papel sobre la bandeja de horno que está encima y en la de abajo echamos un vaso de agua hirviendo.
Horneamos durante 10 minutos y después encendemos calor arriba-abajo y seguimos horneando durante 12 minutos más.
P.D. La receta es de Esbieta, son unas barras fantásticas para bocadillo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario