Ingredientes:
400 g. de harina de repostería
300 ml. de agua templada
1 cucharilla rasa de sal
12 g. de levadura fresca de panadería
Elaboración:
Disolvemos la levadura desmenuzada en un poco de agua templada.
Colocamos en un bol grande la harina tamizada mezclada con la sal. Añadimos el agua y mezclamos bien, añadimos la levadura, mezclamos y tapamos el bol, Dejamos reposar a 25º durante una hora.
Pasado el tiempo sacamos la masa a la mesa de trabajo y desgasificamos un poco a la vez que enrollamos formando un cilindro. Partimos 5 pedazos de unos 120 g. cada uno.
Formamos unas bolas con cada trozo recogiendo la masa hacia adentro, le damos la vuelta y terminamos de formar la bola con la mano. Las dejamos tapadas con papel film durante 10 minutos.
Cogemos cada bola y volvemos a formar otra vez otra bola como antes y las colocamos en bandeja de horno con papel sulfurizado. Las tapamos con un paño y las dejamos fermentar 30 minutos.
Cuando queden 10 minutos para terminar la fermentación encendemos el horno a 230º solo con la parte de abajo encendida y un cuenco con un poco de agua en el fondo.
Hacemos unos cortes a los bollos y horneamos durante 10 minutos. Entonces quitamos el cuenco de agua y encendemos también calor arriba y abajo y los dejamos durante 12 minutos más hasta que queden algo dorados.